viernes, 13 de abril de 2018

Hacer oídos sordos a la mafia del sexo


Ismael López Fauste
Periodista. Ex colaborador del lobby del sexo. Autor de “Escúpelo: crónicas en negro sobre el porno en España” https://goo.gl/y8fMHG
Dec 20, 2017

Hacer oídos sordos a la mafia del sexo

3. f. despect. Grupo organizado que trata de defender sus intereses sin demasiados escrúpulos.
Definición de “mafia” según la RAE.

La semana pasada comentaba la tendencia de los pornógrafos y proxenetas a cambiar su forma de publicidad por algo más sutil a través de entrevistas e “influencers”. También decía que nada de esto sería posible sin la fuerza de la difusión mediática.

Ha sido una semana de campaña. Izquierda Unida ha dicho que nanay a beneficiarse económicamente de la venta de cuerpos, y Aprosex se ha cogido un rebote de miedo en un comunicado porque dice que se debería abandonar esa actitud paternalista hacia las trabajadoras sexuales.

En un orden de cosas más navideño también compartía esta foto -previa a su ingreso en prisión- de Torbe, pornógrafo acusado de trata, con Samantha Villar, periodista.
 
Ismael López Fauste


La complicidad de los medios hacia personas vinculadas con la pornografía no sería tan sospechosa si también mostraran la otra cara de la moneda. La parte fea, la real. Hablo de los daños colaterales, las parejas de aquellos que de repente ven sus deseos de agarrarlas de la nuca y eyacular en su cara. Los mismos que ven sus deseos legitimados por una figura de apodo progresista -porque la tele así lo decidió- que dice que consumir porno libera, que lo que llama trabajo sexual es una experiencia feliz y que, bueno, las mujeres también fantasean con ser violadas. La frase no es mía, es de la Responsable de Igualdad de Podemos, Clara Serra, durante una charla que le ofrecieron a varios representantes del negocio pornográfico en la universidad pública.

Pocos meses después de dejar de colaborar y cortar el contacto con los pornógrafos, tres chicas desconocidas entre sí, menores de edad todas ellas, me contactaron para que les pasara contactos. Vengo de un pueblo pequeño, y las noticias vuelan, supongo. Las tres tenían argumentos muy parecidos:

La pornografía era una alternativa a estudiar una carrera universitaria. Antes tenían una idea contraria, pero ahora estaban convencidas de que a través del porno iban a empoderarse. Dos de ellas usaron esa palabra. Una incluso planeaba alternarlo con la prostitución.

Sacaron la idea de un programa de televisión que vieron a las 10 de la noche donde se entrevistó a una actriz porno que parecía de su edad, aunque no se habló de qué empresas la respaldaban ni qué posición privilegiada ocupaba en el lobby. Pero las muchachas no tenían motivos para dudar que, como mínimo, no se les estaba contando toda la verdad.

Sé que una de ellas está cursando muy felizmente la carrera de Inef, la otra marchó a estudiar interpretación y una tercera quizás cayó en la trampa, aunque no estoy demasiado seguro ni estoy seguro de querer estarlo.

Por muy meapilas que suene -al lobby le gusta la palabra mojigato, lo usa contra cualquiera que no les baile el agua-, lo de dar acceso a adolescentes a este contenido, sin ni siquiera ofrecerles posibilidad de falsear su edad, es como repartir cigarros en la puerta de un colegio. Tienen por un lado las charlas de educación sexual y por otro a una chica que les dice que cuando una mujer no quiere follar, no es que la estén violando. No exagero, está en Youtube.



No he oído hablar a nadie de ver esas vaginas sangrar y a esos tipos que llegan a pagar por meterla y eyacular sobre chicas engañadas mientras bromean sobre quién tiene los pechos más firmes. Aquel día no era el único periodista en la sala.

Sé que a veces las productoras organizan sus propios Behind the scenes y las actrices los difunden con una complicidad apabullante, pero ni siquiera eso es real. Es una maniobra corporativa que hace imposible pensar que el cámara puede venir y metértela de repente mientras te tomas un café sin estar grabando.

Las referentes del trabajo sexual que he conocido son agentes pagadas por las productoras y revistas para atraer carne fresca a la industria del sexo, y al final del día son las que menos ponen el culo.

La mayor parte de productoras de porno ético no son más que inversiones con mayor calidad de imagen que emplean más tiempo en el rodaje pero que igualmente dependen de las productoras sexistas de toda la vida.

Esas pornógrafas feministas que intentan meternos con calzador cuentan con manadas de seguidores menores de edad a los que usan para difundir su producto. La última vez que miré, una de ellas interpretaba a una estudiante que hacía mamadas por 20 euros cuando le enseñaban el billete desde la ventanilla de un coche. Me dio por buscarlo porque en mis sugerencias de YouTube apareció su cara y algo tipo «rechazo escenas machistas» al lado de un vídeo de los Gemeliers.

Pero de esto no se habla, y como no se muestra, en los medios y la política no parecen tener motivos para decirlo o escucharlo. Es probable que hayamos llegado a un punto en el que una visita a Pornhub ofrezca una imagen más objetiva de los intereses de ese negocio.

SexoPornografíaSexualidadProstituciónFeminismo
One clap, two clap, three clap, forty?
By clapping more or less, you can signal to us which stories really stand out.

Go to the profile of Ismael López Fauste
Ismael López Fauste
Periodista. Ex colaborador del lobby del sexo. Autor de “Escúpelo: crónicas en negro sobre el porno en España” https://goo.gl/y8fMHG

Fuente
https://medium.com/@ilopezfauste/hacer-o%C3%ADdos-sordos-a-la-mafia-del-sexo-a780e5ee6d3c






Prostitución, una tortura irreparable: Alika Kinan, víctima de explotación sexual en Argentina


Prostitución, una tortura irreparable: Alika Kinan, víctima de explotación sexual en Argentina
Posted by admin On marzo 27, 2018
Por Angélica Jocelyn Soto Espinosa

Una mujer en condición de prostitución está sometida a violaciones sistemáticas y tiene que activar todos los dispositivos psicológicos para sobrevivir. Es tan desgastante como ir quitándonos los órganos poco a poco. Es una condena de muerte. Una mujer que ha pasado muchos años en situación de prostitución no tiene reparación ninguna, no hay dinero que pague la tortura que viven..

Así lo explicó en entrevista Alika Kinan, sobreviviente de explotación sexual en Argentina que ganó en 2016 un juicio contra sus proxenetas al demostrar que fue víctima de trata de personas, y responsabilizó al propio Estado argentino de haber permitido este delito.

Alika Kinan


EL CORAZÓN DE LA TRATA DE PERSONAS ESTÁ EN LA PROSTITUCIÓN

Alika, que padeció 16 años la explotación sexual con fines comerciales en un burdel en Tierra de Fuego en Argentina, está en contra de reglamentar la prostitución y explica desde su propia vivencia por qué esta industria –aun cuando parece voluntaria- es clave para perpetuar el delito de trata de personas, y atenta de forma irreparable e irreversible contra la vida y la integridad de las mujeres.

Angélica Jocelyn Soto Espinosa (AS).- ¿Cuál es el vínculo entre la prostitución y la trata de personas?

Alika Kinan (AK).- “El discurso reglamentarista, que hoy está instalado completamente en el feminismo liberal y que se ha convertido en un movimiento, coloca la trata de personas y la prostitución en diferentes lugares, pero están relacionados porque la explotación sexual, que es uno de los principales fines de la trata de personas, ocurre mediante la prostitución que es donde se comercializan los cuerpos.

“Si desvinculamos los temas no podemos entender a profundidad la trata de personas con fines de explotación sexual comercial porque perdemos de vista dónde y cómo se genera la oferta de cuerpos, y por qué hay una demanda de los hombres sobre las mujeres y las niñas. El corazón de la trata está en la prostitución.”

AS.- ¿Cómo se genera esta oferta; es decir, cómo opera el sistema proxeneta para captar mujeres?

AK.- “Hace una década hablábamos de la trata de personas como el secuestro de una niña para prostituirla, pero la historia misma nos ha demostrado que existen otras formas de captación que hacen este delito más complejo, dos de ellas son el enamoramiento y la vulnerabilidad.

“La vulnerabilidad es una situación de desprotección o de indefensión que los proxenetas aprovechan para captar, convencer o enganchar a la persona. La vulnerabilidad puede ser económica, pero también hay una relacionada a la integridad sexual de las mujeres; es decir, cuando una mujer ha sufrido una violación, acoso o abuso en la infancia o adolescencia, se pierde como sujeta sexual, se desprende de su propio cuerpo que ha sido utilizado por otros, y eso también la hace vulnerable.”

AS.- Con este antecedente, ¿las mujeres en condición de prostitución pueden ejercer de manera efectiva sus voluntades y derechos?

AK.- “En la prostitución, las más oprimidas son las niñas y las mujeres, no importa su nivel socioeconómico o educativo. Tenemos que analizar que en este sistema, además del capitalismo, el patriarcado se ha encargado sistemáticamente de coaccionar todas nuestras acciones para convertirnos en dependientes.

“Una mujer que está en condición de explotación sexual no es dueña de su ser, de su placer, de su deseo. Nada de eso tenemos en situación de prostitución. No sólo somos pobres económicamente, somos unas desposeídas de nuestro cuerpo y no tenemos un lugar desde donde ejercer derechos.”

AS.- ¿Por qué, a pesar de esto, algunas mujeres en condición de prostitución defienden que es su elección?

AK.- “En los rescates, las fuerzas de seguridad esperan que las mujeres se lancen a sus brazos y les digan ‘soy víctima’. Para muchas es muy difícil que se reconozcan como tal porque la prostitución es tan desagradable, tan tortuosa, que prefieren creer que lo disfrutan.

“Creer que una está porque quiere o por amor a su proxeneta es una forma de sobrevivir, ya que sería devastador psicológicamente entender que no hay escapatoria. Y en realidad no la hay porque una vez que entran en el sistema prostituyente, la culpa y la estigmatización social las acorrala. Es fácil para el imaginario social decir que esa mujer está ahí porque quiere o porque le gusta, pero ellas no solamente sobreviven a quien paga por sexo, incluso afuera sobreviven a toda la sociedad que las estigmatiza.”
 
Prostituta.Stalin Céspedes

AS.- Según tu experiencia ¿la prostitución tiene elementos cercanos a la esclavitud?

AK.- “Toda la configuración que tiene la prostitución es una forma de esclavitud moderna, pero yo redoblo la apuesta y digo que es una forma de tortura. Es equiparable a la tortura que sufren los soldados en la guerra.

“Una mujer en condición de prostitución está sometida a violaciones sistemáticas y tiene que activar todos sus dispositivos psicológicos para sobrevivir. Es tan desgastante como ir quitándonos los órganos poco a poco. Es una condena de muerte. Una mujer que ha pasado muchos años en situación de prostitución no tiene reparación ninguna, no hay dinero que pague la tortura que viven.

“Esto es así porque un producto se puede vender una vez, pero a las mujeres las vendes infinidad de veces, y ninguna mujer explotada sexualmente se convierte en millonaria porque por más que te esfuerces dentro de la industria, el dinero que generas sirve nada más para cubrir los daños físicos que te causa la prostitución.

“En mi experiencia, al día siguiente de haber estado con varios hombres, el dinero que recibía (sólo me daban 30 o 40 por ciento de lo que generaba) era para comprar la pastilla del día después, comprar antisépticos para la vagina y medicamentos. No existe ningún tipo de enriquecimiento para la mujer que está en condición de prostitución, pero sí para quienes son dueños de los prostíbulos que se garantizan el 60 por ciento de la ganancia.

“A nosotras nos guardaban el dinero en cajas fuertes porque decían que no teníamos la capacidad de resguardarlo. Decían que todo lo que generábamos se iba al pago de vivienda, multas por llegar tarde, productos de higiene y alimentación, que supuestamente son gastos para mejorar nuestras condiciones. Si regulamos, no es para mejorar las condiciones de las mujeres es para reforzar la industria.”

AS.- ¿El reconocimiento de derechos laborales es la vía para evitar estas prácticas?

AK.- “Estos reclamos que vemos hoy se hicieron hace 100 años. La libreta sanitaria se instauró hace 100 años en México y Argentina, y no era para garantizar ningún tipo de derechos, sino para garantizar que las mujeres no enfermaran a los hombres. Yo misma, hace 10 años, estaba en una libreta sanitaria y en ningún momento se procuraba mi salud, era para desechar a las que estábamos enfermas.

“Entre más buscamos en nuestra propia historia nos damos cuenta que esto que reclaman a modo de derecho ya existió y fue lo que permitió que se consolidaran impunes las redes de trata con la participación del Estado.”

AS.- Aún con la garantía de derechos, ¿la prostitución es riesgosa para la vida y la integridad de las mujeres?

AK.– “En la prostitución no hay ninguna garantía de salir viva. A largo plazo hay un alto riesgo de terminar enferma de VIH/SIDA, o como drogadependiente con una condición absolutamente irreversible por las grandes ingestas de alcohol y consumo de estupefacciones. Es muy fácil dentro de esos mercados tan marginales acceder a drogas, que incluso son una herramienta necesaria para dejar de sentir dolor.

“A corto plazo, cuando entras a una habitación con un hombre desconocido lo que sabemos es que si no accedemos a todo lo que pide en esa habitación cerrada, con toda nuestra vulnerabilidad expuesta, podemos ser violadas o asesinadas. Esto incluso con derechos o garantías sanitarias.”



AS.- ¿Consideras que el discurso reglamentarista afecta al combate de la trata de personas que sí es reconocido como un delito?

AK.– “Afecta de manera muy nociva porque el discurso reglamentarista es el mismo del proxenetismo. Con este discurso estamos dando rienda libre a todos los proxenetas, dejamos de tener el poder de denunciar y los proxenetas se convierten en empresarios. A ellos les estamos garantizando impunidad, y en ninguna medida les estamos garantizando mejores condiciones de vida a las mujeres que están con situación de prostitución.

“La prostitución es un privilegio netamente machista que tienen los hombres de poseer y utilizar los cuerpos de las mujeres. Hay que preguntarnos quién se beneficia, quién genera su propia economía en función del cuerpo de las mujeres valiéndose de su vulnerabilidad. Sabemos que las redes de trata y el lobby proxeneta generan 40 mil millones de dólares anuales en el mundo. Es tanta su ganancia que las sanciones no les hacen nada”.

“Con este discurso, las mujeres más neoliberales tratan de eliminar como sujeto político del feminismo a la mujer. ¿Pero a quién quieren poner como sujeto? Todos los días batallamos desde el feminismo radical para que el feminismo siga siendo para y por las mujeres.”

AS.- ¿Cómo combatir la trata de personas desde la prostitución?

AK- “La trata de personas, que es un negocio tan millonario, resurge y adopta medidas camaleónicas para poder sobrevivir. El Estado puntualmente requiere a nivel global leyes antitrata y políticas estatales de reinserción social, económica y educativa para las mujeres y las niñas que dejan la prostitución. Hay que señalar a quienes pagan por sexo, sin prostitución, no hay trata. También se necesitan partidas presupuestarias generosas para la reinserción y la reparación, aunque en realidad a mí me robaron 16 años de mi vida que nadie me va a devolver”.

Luego de años de trabajo de recopilación de pruebas y reconstrucción de hechos, Alika no sólo logró la cárcel para tres tratantes, sino que consiguió un juicio histórico contra el municipio de Ushula y el Estado argentino para que –por primera vez- indemnizara a una víctima de trata de personas. Si bien sólo admitió pagar 780 mil pesos de reparación, esta sentencia –asegura Alika- es ahora un antecedente al que pueden recurrir otras mujeres en el mundo para llevar a juicio a su propio Estado por permitir la trata de personas a través de reglamentar la prostitución.

Fuente:
http://www.la-critica.org/semblanzas/entrevista-prostitucion-una-tortura-irreparable-alika-kinan-victima-de-explotacion-sexual-en-argentina/





Explotación sexual y trata de niños: "la impunidad es regla" en Latinoamérica


Explotación sexual y trata de niños: "la impunidad es regla" en Latinoamérica
AMÉRICA LATINA
10.04.2018

Falta de planes gubernamentales integrales, impunidad y pocas condenas a explotadores y perpetradores de la violencia sexual hacia niños, niñas y adolescentes: éstos son los principales motivos que imposibilitan abordar la explotación sexual y trata de forma adecuada, según los expertos consultados por Sputnik.

La explotación sexual es una actividad ilegal que se da cuando una persona es sometida de forma violenta a realizar actividades sexuales sin su consentimiento por la cual un tercero recibe una remuneración económica. Este delito existe en todo el mundo, favoreciendo así el secuestro y traslado de personas, principalmente la de mujeres, niños y niñas, que son explotadas hasta que no resultan atractivas sexualmente.

Sputnik entrevistó al miembro del Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas (NU), Luis Pedernera, quien aseguró que son problemáticas que están "íntimamente ligadas a la pobreza, los conflictos armados y las crisis económicas".
La trata, justamente por ello, reviste muchas formas diferentes. Pedernera considera que tanto por la cantidad de personas involucradas, el alto margen de ganancias que se obtienen, la cantidad de dinero que se produce, y el hecho de que generalmente son delitos transnacionales, son problemáticas "muy complejas" que dificultan la identificación y lucha en su contra.

"Es dinámica y adaptable y, al igual que otras tantas formas de actividad delictiva, cambia constantemente" para burlar la labor de prevención de los organismos encargados de hacer cumplir la ley, se lee en el Manual para la lucha contra la trata de personas de NU.


El experto destacó que hay un "escaso desarrollo de planes integrales" para abordar la problemática
"en la mayoría" de los países, y que "pareciera que quienes cometen esos delitos son inmunes a las leyes", ya que prima la impunidad: "las condenas se cuentan con los dedos de la mano, son prácticamente irrelevantes", aseguró.

Por ello Pedernera considera que "es un fenómeno que avanza fundamentalmente porque la impunidad es como una regla que se cumple a rajatabla".

En ese sentido, contó que últimamente la explotación está tomando una forma "mucho más sofisticada" que la tradicional sexual o laboral: la maternidad subrogada. 

"El Comité siempre pide especial atención a los Estados para que tomen resguardos para esos contratos de maternidad subrogada, para que detrás de ellos no se escondan comercios de personas y trata", apuntó.

Las causas
El 21 de marzo vio luz un caso de explotación sexual en un club de fútbol argentino; los días consecutivos se dieron a conocer más hechos similares. Varios especialistas consultados por Sputnik en ese entonces (ver nota) plantearon que esa práctica violenta no es poco frecuente, y señalaron que no es casualidad que un caso suceda a otro, y ese otro a otro más.

La explotación sexual y tráfico de niños en Latinoamérica es un problema que las sociedades enfrentan de forma endémica porque, según los especialistas, es un problema endógeno a nuestra cultura.

"Hay una violencia que subyace, de carácter estructural, que tiene que ver con el funcionamiento del sistema económico y del lenguaje entendido en su sentido más amplio: como expresión de cultura, formas de sentir, pensar, hacer", explicó a Sputnik el presidente del Comité Nacional para la Erradicación de la Explotación Sexual Comercial y No Comercial de la Niñez y la Adolescencia del Uruguay, Luis Purtscher.

Esas formas "naturalizan" la violencia ejercida contra los niños, niñas y adolescentes, e "invisibilizan" la explotación y trata "culpabilizando a las víctimas de su situación, sacando a los adultos la responsabilidad que podrían llegar a tener", aseguró el experto.

"Con frases como ‘esto ocurrió siempre', ‘lo hacen por un par de zapatillas' (botines) —agregó-, queda expuesto el lugar perverso en el que nos encontramos, donde por un lado idealizamos a los jóvenes porque deseamos hedonistamente la juventud, y por otro, los cargamos de adjetivos negativos: son los que se drogan, los que se maman, los que andan rápido en moto, los que se prostituyen por un par de zapatillas".



En América Latina
Esa especie de ambivalencia cultural es denominador común en el mundo, pero dado que la "división del trabajo" y el "lenguaje" difieren de país a país, señaló Purtscher, la violencia sexual y tráfico de personas adquieren diferentes matices. 

"Hay países que son de origen [de trata], algunos sólo de destino, y países como Uruguay, que son de origen, tránsito y destino", indicó.

Según el informe anual del Departamento de Estado de Estados Unidos, las mujeres y niñas uruguayas (y, en un menor grado, los adultos transgénero y los varones jóvenes) son sometidas a trata con fines de explotación sexual dentro del país. Aunque la cantidad de uruguayos explotados en el exterior ha disminuído, los destinos más comunes siguen siendo España, Italia, Argentina y Brasil.

Pedernera, que trabajó con autoridades de varios países de Centroamérica en 2018, aseguró que en Guatemala "las pandillas y maras usan a las personas [traficadas] para extorsionar y generar recursos". Según Pedernera, el 80% de las desapariciones de personas que se producen allí son de "menores de edad y niñas, fundamentalmente asociadas a fenómenos de trata".
A su vez, según Unicef, en 2007 Guatemala dio más de 5.100 infantes en adopción irregular, en transacciones cuyo costo osciló entre 40.000 y 50.000 dólares cada una.

En Ecuador la trata se da más para trabajos forzados, principalmente destinada a la forestación y mineras clandestinas que hay en la frontera con Colombia, donde también pulula la prostitución.

Abusos sexuales a menores sacudieron en 2017 la conciencia ciudadana en Ecuador
Esa zona, que abarca 586 kilómetros, se caracteriza por "elevados niveles de exclusión e inequidad social, marcada debilidad institucional, y la vecindad con una zona de conflicto armado y actividades ilícitas", según un informe de NU.
En líneas generales, los países más ricos atraen a víctimas de diferentes orígenes, incluso de otros continentes, mientras que en países menos prósperos se observan corrientes de trata nacionales o subregionales, según datos del Informe Mundial de Trata de Personas de NU.

En ese sentido, Pedernera contó que se da "un triángulo" hacia Estados Unidos, donde los niños centroamericanos migrantes son las "víctimas preferentes" de la trata de personas.



Explotadores, perpetradores y víctimas: ¿quiénes son?

"No son monstruos aberrantes que viven en una cueva. Son nuestros vecinos, nuestros compañeros de trabajo", aseguró Prutscher. En su gran mayoría son hombres de entre 30 y 70 años, tanto quienes captan e ingresan a las víctimas en el sistema de explotación como quienes perpetran el delito.

"Básicamente son adultos que detentan un determinado poder sobre la población infantil y adolescente —aseguró el experto-, se abusa del poder para conseguir un placer sexual. Se da en un barrio, en un club de fútbol, en un centro educativo".

En cuanto al perfil de las víctimas, Prutscher aseguró que es su gran mayoría se trata de niñas y mujeres pobres de entre 13 y 17 años.

Cifras globales


Se estima que en el mundo hay 2,5 millones de personas víctimas de la trata. Sin embargo, se calcula que por cada una de ellas, existen 20 más sin identificar, según se lee en el informe de 2014 la Oficina de NU contra la Droga y el Delito.
Dos terceras partes de las víctimas detectadas por las autoridades son mujeres. 79% de ellas fueron sometidas a explotación sexual, 18% explotadas en trabajos o servicios forzados, según la información recopilada por UNODC en el Reporte Global 2009.
Se calcula que las ganancias globales de este mercado ilícito ascienden a los 32 billones de dólares por año, según la Iniciativa Global contra la Trata de Personas UNGIFT.
52% de los tratantes o personas dedicadas al tráfico humano son hombres, y 42% mujeres. Sin embargo, en el 30% de los países donde se sabe el sexo de los autores, las mujeres fueron declaradas culpables de delitos relacionados con la trata más veces que los hombres, dice el Reporte Global 2009 de la UNODC.
Según el mismo reporte, 63% de los 155 países y territorios que han ratificado el Protocolo de NU contra la Trata de Personas, han aprobado leyes internas que sancionan este delito, número que se duplicó entre 2003 y 2008. No obstante, en ese mismo período 40% de los países con leyes vigentes contra la trata no registraron ninguna condena por este delito.
Lea más: CIDH destaca avances en materia de DDHH en Guatemala

Cifras regionales

El 13% de las víctimas de la trata detectadas en Europa Central y occidental son de América del Sur.
Según Información de la Iniciativa Global contra la Trata de Personas UNGIFT, de los 32 billones de dólares generados en el mundo, 1,3 billones de dólares (4,1%) son producidos en América Latina; 49% proviene de países industrializados que se caracterizan por ser los principales destinos de las víctimas de origen latinoamericano.
66% de las víctimas de trata identificadas desde 2006 en América Latina son mujeres, 13% niñas, 12% hombres y 9% niños.

Fuente
https://mundo.sputniknews.com/americalatina/201804101077750030-explotacion-sexual-trata-de-personas/